20 feb 2012
Reflexiones
Tras varios días de reflexiones y casi todas acertadas, hoy es la propia Caterham la encargada confirmar algo que ya sospechábamos. Echaron a Trulli del equipo porque querían dinero. Es así de simple. Y eso explica su salida tan repentina del equipo. ¿Cómo hemos llegado a esa conclusión? Sencillo, en Caterham han anunciado hoy un acuerdo económico con la compañía rusa Sibur. Es el pan que traía Petrov, ya hecho, debajo del brazo. Mientras que Trulli siempre ha sido el que amasaba. Él ayudó al equipo a comenzar desde cero, y ha desarrollado el nuevo coche. Ahora será Petrov quien se aproveche del trabajo de Jarno, que dicho sea de paso, ha estado viviendo de sus propias rentas en las últimas temporadas que ha pasado en el paddock, no a costa de convenios con patrocinadores. Así, también quisieran muchos obtener una plaza en F1. Ya nos lo adelantaba Barrichello en su twitter, "el dinero lo controla todo" decía. Esto nos lleva a pensar que el nuevo rumbo de este deporte no sea quizá, el descubrir pilotos con talento o el reto de crear un coche competitivo. Sino más bien el de hacer negocio, por supuesto un negocio que prospere y genere beneficios y aspire a la permanencia, todo lo demás es accesorio, como Jarno y otros tantos pilotos que no están ya en parrilla.
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